Ronda presenta su nueva marca turística, obra de Kukuxumusu

Revelador el pronóstico del político de turno (en este caso política) cuando, antes de la presentación oficial, manifestó: “La nueva imagen de Ronda no va a dejar indiferente a nadie”. Los que encargaron la marca gráfica tenían claro que como poco suscitaría controversia, y eso siempre viene bien, debieron pensar, por la tranquilidad y alegría con la que despachan el asunto.

En la misma declaración, la concejala de Turismo, avisaba de que el diseño resultaría “algo más que llamativo” y es que esta criatura les venía con la polémica tatuada en plena frente.

El Ayuntamiento de la ciudad malagueña de Ronda encargó al estudio navarro Kukuxumusu (https://www.kukuxumusu.com) el diseño de la imagen turística de la localidad. El elemento principal de la identidad es una cabeza de toro a lo arcimboldo, construida con distintos objetos que representan algo significativo de la ciudad. Esos objetos son: (copio y pego)

Una luna “en referencia a las noches románticas y de embrujo”, una hoja verde por la vinculación de Ronda con la naturaleza y el Medio Ambiente; el sempiterno Tajo, por la Ronda monumental; una navaja, al ser la ciudad “tierra de bandoleros”, así como un tenedor indicativo de su riqueza gastronómica. El corazón rojo advierte que Ronda es “ciudad de congresos y amistad”

Este símbolo se acompaña de un logotipo en caligrafía con la denominación de la ciudad y debajo el eslogan Suerte Natural.
Verde, amarillo, rojo, turquesa, azul cielo, azul marino, son los colores del logotipo, una combinación un tanto arriesgada y excesiva, en la que sobran un par de tonos.

La imagen está pensada principalmente para usarse en artículos promocionales, imanes, camisetas, tazas y demás material para turistas.
Y es quizá aquí donde la identidad de Kukuxumusu contiene su razón de ser. Es la versión rondeña del famoso torito pamplonica.
Este funcionamiento de una identidad como pieza decorativa puede ser la clave de éxito del diseño —en tanto que cumple con el objetivo de promocionar el pueblo—  y el acierto de la elección.
No me pega para imagen institucional porque entiendo que como marca corporativa el trabajo tiene poco recorrido y un registro muy limitado pero aprecio el valor estético que contiene, muy adecuado para el uso que aquí se le presupone al diseño.
La identidad podría considerarse un acierto en este sentido

Para finalizar quisiera llamar la atención sobre un aspecto que me han causado cierta perplejidad leyendo las distintas reseñas que recogían el tema. Es el hecho del dedazo bien asumido por todas las partes con este trabajo (en una de las fuentes consultadas  estiman el coste del proyecto en 9.000 euros). Incluso no hay empacho en decir lo siguiente: “La creación del diseño supone un paso más en la estrecha relación entre Kukuxumusu y Ronda. Hay que recordar que el año pasado su fundador y director creativo Mikel Urmeneta fue nombrado embajador de la ciudad (puedes ver la noticia aquí)”.