De Salvatore Ferragamo a Ferragamo. Así, a secas, oficialmente sin el nombre del fundador

Salvatore Ferragamo inicia nueva etapa, con cambio de nombre y cambio de logo. Una renovación que, tras la entrada hace escasos meses en la dirección creativa de un jovencísimo Maximilian Davis, era de prever. Faltaba saber cuál iba a ser el camino adoptar. Ahora, ya lo sabemos. Y lo cierto, es que no ha habido sorpresas. 

La Maison se suma a las marcas de moda que apuestan por la reducción, la síntesis y la simplificación para dar lugar a una identidad más neutra y menos decorativa. Lo observamos especialmente en la tipografía.

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Naming: De Salvatore Ferragamo a Ferragamo. Un paso natural

La mención exclusiva del apellido del fundador, sin al nombre de pila, no está exenta de lógica. Coloquialmente, el público de la marca no pronuncia el nombre de pila. Y lo habitual es decir sencillamente Ferragamo. 

Este movimiento es muy similar al que ha llevado a cabo otra marca italiana, Ermenagildo Zegna, que pasó a ser Zegna tras su rebranding en enero de 2022.

El nuevo logo de Ferragamo  

La anterior versión del logo de Ferragamo databa de 1982. Con 30 años a sus espaldas, es obvio que la revisión y la adaptación a los nuevos contextos de la marca era obligada. Para entenderlo mejor, fíjate en la versión del monograma, y la falta de equilibrio entre la S y la F.

Peter Saville, a los mandos del diseño

El encargo del nuevo logotipo ha recaído en el británico Peter Saville. Todo un veterano del diseño, quien recientemente presentó el rediseño de Aston Martin.

En el mundo de la moda, Saville es especialmente conocido por el rebranding que llevó a cabo de Burberry, con un nuevo logo y monograma tras la llegada de Riccardo Tisci. También por el nuevo logo de Clavin Klein tras la llegada de Raf Simons a los mandos de la dirección creativa en 2017. Y más recientemente, Saville ha desarrollado el nuevo monograma de Tommy Hilfiger. 

Tipografía
Anteriormente, en el logo podíamos leer en trazos caligráficos Salvatore Ferragamo, en lo que venía a ser una clara asociación con la firma personalizada del fundador de la marca. 

En el nuevo logo, los trazos script desaparecen. La tipografía es la protagonista, sí, pero sin ningún símbolo añadido. Tan solo leemos Ferragamo en unas capitulares rotundas y sobrias con un ligero remate o serif.   

Esa nueva tipografía está inspirada en las inscripciones en piedra del Renacimiento florentino, según comentan en el comunicado. 

Color Ferragamo
Otra novedad del rebranding es el nuevo color insignia que acompaña a la nueva identidad visual. Se trata del tono 3546C Pantone, un rojo profundo que Ferragamo ha registrado ante el instituto del color. 

¿Qué va a pasar con la versión monograma de Ferragamo? 

No deja de ser llamativo que la marca se desprenda de esos trazos caligráficos cuando en 2021 presentó una colección masculina con el monograma de la marca ‘SF’. 

Así describían en la web de Ferragamo el diseño de esta versión monograma del logo:

«Un verdadero símbolo de pasión, innovación y creatividad. Un monograma único con un rasgo refinado y reconocible que se convierte en el elemento distintivo de la nueva línea masculina SF Logo.

Elegantes y sutiles, las dos iniciales están finamente estilizadas para personificar la visión pionera y la esencia atemporal de la Maison».  

¿Qué sucederá en esta nueva etapa? ¿Llegará una segunda versión en monograma?