Moving Brands rediseña la marca Blank

Aristóteles decía —simplificando mucho, que me perdonen los sabios— que en las artes la realidad se maquillaba para resultar más sugerente y apetecible.
Ahora que la imagen lo es casi todo, conviene tratarla de tal forma que aquello que quiera mostrarnos lo haga eficazmente.

Blank Digital es un estudio neoyorquino que se dedica a maquillar imágenes. Esta boutique del retoque se caracteriza por la alta calidad de sus producciones, exquisitas y cuidadas al extremo.
Actualmente viven un momento de consolidación y expansión, y se han marcado como objetivo primero introducirse en el mercado de la moda y el lujo.
Esto ha obligado a un rediseño de la identidad que represente el nuevo rumbo y la consolidación en el sector.
La anterior identidad carecía de sofisticación y resultaba ineludible introducir este matiz en la marca gráfica.

El encargo de la nueva identidad se ha asignado a Moving Brands (www.movingbrands.com). Básicamente, el trabajo ha consistido en generar un universo que vaya más allá del cambio de logotipo y establecer una atmósfera sofisticada y dinámica para los elementos gráficos que funcione en el medio físico y digital.
Moving Brands propone para Blank Digital una manera muy concreta de contar las cosas, estableciendo para ello una guía de cómo se han de presentar las imágenes, las retículas para las aplicaciones y demás.

Como actor principal de toda representación, el logotipo ha supuesto una ruptura total con el anterior. Ahora el logo adopta una tipografía de las didonas, de alta variabilidad en los trazos, donde los más finos son eliminados para potenciar el contraste y por tanto el halo de tipografía refinada.
Con estos cambios el logotipo aumenta la mancha, se hace más visible y sobre todo gana personalidad.
La gama de colores vira a tonos metálicos y persigue la neutralidad.

Otro acierto más de Moving Brands, que evidencia el gusto de este equipo por los planteamientos exactos y trabajados en el campo del branding.