La marca londinense, Ben Sherman, renueva su identidad corporativa

Ben Sherman, la marca londinense, renueva su logo y cambia la imagen de la marca con un nuevo rediseño de su símbolo e imagen corporativa

Ben Sherman es una de esas marcas cargadas de historia, pero más por la adopción de sus productos por parte de ciertas subculturas urbanas, que por la presencia y proliferación de su logotipo en sí. Aunque su actividad principal es la producción de camisas para hombre, venden todo tipo de ropa unisex.

La marca nace en Brighton en 1963 y pronto añade a su identidad el uso del símbolo de la Royal Air Force (Fuerzas Aéreas Británicas), consistente en una escarapela de 3 círculos concéntricos: rojo, blanco y azul. Este símbolo también es conocido como el mod target, pues esta subcultura hizo suyos los productos de Ben Sherman desde sus inicios y a día de hoy sigue apareciendo en corrientes revival del movimiento mod, a veces incluso totalmente desligado de la marca.

Los productos de Ben Sherman también han estado muy vinculados a los inicios del movimiento skinhead europeo y ha sido marca fetiche de muchos grupos musicales, teniendo un notable resurgir con la ola britpop de los 90. Su popularidad en el mundo de la música llevó a la marca a sacar una nueva línea de ropa acompañada por un nuevo isotipo: Ben Sherman Plectrum (púa). Ya con este lanzamiento, aunque no se modificó la marca, se empezó a usar un nuevo lenguaje tipográfico, utilizando la familia que hoy da forma el nuevo logotipo: News Gothic (concretamente Bold Condensed para el logo).

Todo apunta a que tanto el mod target como la púa seguirán coexistiendo con la nueva identidad. Ésta hizo su primera aparición a mediados de verano en la web, pero no se ha hecho oficial hasta septiembre de 2011, coincidiendo con la apertura de la nueva tienda Ben Sherman en Carnaby Street, Londres.

La nueva imagen ha sido diseñada por el propio equipo de diseño de Ben Sherman en colaboración con Brinkworth (brinkworth.co.uk), empresa especializada en diseño de interiores.

La renovación de una marca considerada legendaria por muchos no es tarea fácil . El paso de una tipografía script a otra de palo seco resulta, cuando menos y a primera vista, atrevido e incluso aséptico. No obstante, observando la manera en que el nuevo logotipo fluye y es aplicado en el universo creado dentro de la tienda Ben Sherman de Carnaby Street, todo cobra sentido. La marca casa perfectamente con la idea de elegancia clásica inglesa y recupera esa nostalgia hacia los inicios del negocio, tratando de proyectar una imagen de manufactura y tradición y huyendo de estereotipos de modernidad.

Podríamos decir que nos encontramos ante una marca que multiplica su poder entendida en su contexto y ligada a sus propios productos, que han sido los que le dieron la personalidad y popularidad de la que hoy goza.

En propias palabras de los diseñadores: «Brinkworth ha producido un entorno global alrededor del concepto de Ben Sherman. Las referencias a los iconos del diseño británico como los pubs, tiendas típicas de repostería y el metro londinense crean un concepto fuerte y un entorno fresco para la marca legendaria».